Una de las cuestiones más complejas y esenciales de las evaluaciones psicotécnicas, a mi parecer, es integrar o comprender la estructura de personalidad de un entrevistado respecto a su posible desempeño o rendimiento. Me encuentro, muy seguido, pensando si la persona que tengo enfrente, a quien veo inmaduro emocionalmente, es realmente indicado para ocupar la posición a la que aplica.
Desde el punto de vista de la clínica alguien que no mantiene un buen equilibrio entre su vida laboral y afectiva, en algún momento deberia manifestar algún síntoma que puede expresarse tanto en una disminución de su rendimiento como en una baja de su defensas y una consecuente enfermedad o en alguna crisis personal. Sin embargo, si uno rastrea la historia laboral y tiene oportunidad de chequear referencias verá que la trayectoria es sólida y que las empresas en las que se desempeñó están conformes y recomendarían al candidato. Las "debilidades" no salen fuera de lo común y es esperable que todos la tengamos.
Realmente tendrá tanta importancia la estabilidad y el equilibrio en el desempeño laboral ? O serán cuestiones independientes ? Dónde está el límite ?
1 comentario:
Creo que es muy interesante el blog. Muchas veces nos encontramos con el candidato que aparentemente califica y sin embargo, está emocionalmente descompensado. Me parece que no hay "dos vidas" una laboral y otra personal, creo que son las dos caras de una misma moneda.
Saludos Gabriel !!!
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